En Rosario, la poesía da su batalla en vivo

                                                             Viernes 10 de octubre de 2014 | ADN Cultura. La Nación

Festival que crece. Con sus permanentes recitales públicos y sus mesas de debate, el encuentro internacional que se realiza en la ciudad santafesina despliega un fértil panorama de las muchas estéticas de los creadores actuales.


Por Martín Lojo

Aunque el nombre del bar Bienvenida Casandra no podría ser más adecuado para un recital de poesía, los que demoraron su copa más allá de la medianoche, cuando comienza la última actividad diaria del 22º Festival Internacional de Poesía de Rosario, no saben bien cómo reaccionar ante los jóvenes y no tan jóvenes poetas que alzan la voz y eligen sus palabras más contundentes para imponerse al murmullo. De a poco las respuestas desprejuiciadas aparecen, desde la diatriba jocosa –“¡pará con la demagogia!”- hasta el aplauso fervoroso y, más de una vez, el silencio expectante. En ese espacio hostila la lectura, la poesía parece una batalla viva y se extiende en las conversaciones de los pasillos: técnicas de costura de libros y materiales de encuadernación, cuál es el mejor modo de entrevistar a un poeta, el proyecto de un ensayo sobre el libro de poemas perdido de Juan L. Ortiz.
Quien asistió a los tres días de lectura, del jueves 25 al sábado 27 de septiembre, más la visita a una completísima feria de editoriales independientes, pudo reconstruir un mapa extenso de poéticas tramado por varias generaciones y asomarse a la producción de jóvenes autores que escriben en español en tres continentes. El homenaje a la obra de Juan José Saer con el que abrió el Festival, en la sala del centro cultural Plataforma Lavardén, fue ya un punto de partida de la lucha de tradiciones y centros. En la mesa Escribir con Saer/Escribir contra Saer, Fabián Casas, Francisco Bitar y Jorge Isaías discutieron sobre la influencia de la obra del santafesino en las nuevas generaciones. Sus logros poéticos, mediados por la poesía de los 90, son ya una fuente de recursos en la que los autores jóvenes pueden abrevar sin el peso de su sombra. Bitar trazó un mapa contundente para señalar el pulso de la escritura actual: “Hay una patria chica entre Rosario y Bahía Blanca, con Buenos Aires en el centro”. Tomar distancia de ese centro estimula el trabajo más radical “entre la resistencia y el resentimiento”.
El amplio recorrido de las lecturas, a las que día a día se acercó una cuantiosa concurrencia, permitió oír producciones nuevas de poetas ya consagrados, como Fabián Casas, Osvaldo Aguirre, Elvio Gandolfo, quien despertó elogios en la presentación de su reciente libro El año de Stevenson, o la cordobesa María Teresa Andruetto, que puso en escena un diálogo entra “la chica pueblerina que fui” y una joven Patti Smith. Pero el punto fuerte del Festival en los últimos dos años fue el desbroce de la producción de poetas jóvenes. En 2013 la Editorial Municipal de Rosario y el Centro Cultural Parque España editaron 30.30, el libro oficial del encuentro, que reunió trabajos de 30 poetas argentinos nacidos entre 1983 y 1991. Este año, Daniel García Helder, Daiana Henderson y Bernardo Orge ampliaron la búsqueda con la selección de 33 poetas de habla hispana, nacidos entre 1980 y 1995 en América Latina, España y Estados Unidos, rastreados no sólo a través de libros, revistas y plaquetas, sino también en el inabarcable universo de los soportes digitales. La presentación de 1.000 millones, con la lectura de varios de los antologados fue uno de los acontecimientos del Festival.
Entre esas nuevas voces fueron notables la sutileza del jovencísimo Fidel Maguna (1993), la velocidad pop del venezolano Julio Alberto Balcázar (1984) o las breves viñetas locales del costarricense Jeymer Gamboa (1980). Una atención especial merece Tomás Fadel (1990), poeta y editor mendocino, que leyó fragmentos de su largo texto en prosa La montaña, un ensayo poético que acorrala el paisaje desde la geología, el turismo, el deporte, la metafísica o la aventura, y recuerda el tono de “La gran salina”, de Ricardo Zelarayán. También deparó una sorpresa Charly Gradin (1980), quien trabaja con diversas herramientas de producción informática de textos. Leyó fragmentos de varios poemas escritos “tuneando” frases extraídas de búsquedas en Google. Paradójicamente, el resultado suena más cercano a una balada marinera del romanticismo o a una “temporada en el infierno” rimbaudiana que al pastiche posmoderno.
Escuchar poesía hora tras hora durante varios días podría ser una experiencia abrumadora y, sin embargo, el flujo ininterrumpido de voces permite oír los matices cada vez con mayor claridad. Primero impacta la entonación, el histrionismo, la lectura preparada para ser dicha en voz alta. Pero poco a poco la performance atrevida, muchas veces no respaldada por un texto interesante, va cediendo lugar a los ritmos, el trabajo depurado de las formas y el hallazgo de tensión que hace parar el oído y abre la posibilidad de un reconocimiento inesperado. Entre la consabida sonoridad girondiana, la exposición de la intimidad o la recuperación de la voz de la infancia, empieza a destacarse el trabajo minucioso con los objetos, la condensación emocional de una mirada sobre la superficie trivial de la materia cotidiana. Fue el caso de la breve lectura del bahiense Mario Ortiz (1965), experto en disolver con absoluta transparencia la frontera entre las palabras y las cosas, la fugacidad de la vida en la brasa del tabaco, rescatada por la cordobesa Eugenia Cabral (1954): “y el humo: símbolo de olvido e impotencia/ de querer retener lo que se esfuma/ -antes eterno, ahora fugitivo-,/ breve danza de amor entre los dedos,/ ocaso que arrastra el cuerpo del día”, o la melancolía abandonada que escribe el santafesino Francisco Bitar (1981): “La cerveza vieja/ que había en los envases/ se volvió vinagre incluso antes/ de que llegara este verano/ y cuando el pasto creció/ hasta la altura de las rodillas/ ya no se distinguía/ el tallo marrón de las plantas/ del tallo marrón de las botellas”:

Los poemas de Pedro Mairal expusieron esa diferencia de tonos. Aplaudido por el impacto de sus “Pornosonetos” en la lectura nocturna del bar, caló mucho más hondo con la cadencia de “Cipriano”, su larga elegía al “último paisano”, en la sesión vespertina del Centro Cultural Fontanarrosa. “Y yo que no sé quién soy, mi cara sin historia,/ siguiendo transparente su cajón, su cuerpo que ahora sí/ se queda quieto,/ pero usted sigue moviéndose, viajando en mi recuerdo,/ mudándose y mudándose, Cipriano,/ muerto nómade,/ difunto golondrina”.

1.000 millones. Poesía en lengua española del siglo XXI

En continuidad con la tarea emprendida en los últimos años de publicar al menos un libro en cada edición del ciclo, se presenta en el marco del XXII Festival Internacional de Poesía de Rosario la antología 1.000 millones. Poesía en lengua española del siglo XXI, que reúne a treinta y tres autores nacidos entre 1980 y 1995.

1000 millonesHasta 2012 los libros del Festival rindieron homenaje a diferentes figuras de la poesía argentina del siglo XX, distintos actores del campo editorial argentino compilaron entrevistas dispersas, reeditaron ensayos y otros textos inhallables y establecieron obras completas acompañadas de estudios preliminares. En 2013 se publicó 30.30. Poesía argentina del siglo XXI, una compilación de textos inéditos o publicados después de 2000 por autores nacidos en Argentina a partir de 1983.
1.000 millones sigue la línea iniciada con 30.30 – selecciona y ordena en un libro la producción de autores que están comenzando su trayectoria– pero a diferencia de este no se limita a un solo país sino al universo entero de la lengua española. El libro pone a disposición de los lectores una serie de propuestas poéticas desarrolladas en Latinoamérica, Europa y EE.UU. durante la última década.De esta manera, indica el prólogo, “la antología propone un límite y un orden posibles para una variedad de fragmentos poéticos provenientes  de  circuitos  literarios  distantes  o  desconectados entre sí”.
En los autores que integran la selección pueden leerse en cada caso distanciamientos y filiaciones que dan cuenta de un campo activo: tratamientos más o menos disruptivos en relación a las respectivas tradiciones poéticas nacionales, influencias extranjeras, trabajos inscriptos en corrientes regionalmente consolidadas, basados en movimientos emergentes o aislados en su particularidad. Pero a la vez, al leer el conjunto más allá de las diferencias estéticas y lexicales, se percibe el sesgo común que imprime a los textos el hecho de haber sido escritos sincrónicamente, durante un mismo período de tiempo, y en la misma lengua.
1000 millones
Así como para los chinos diez mil significa tradicionalmente todo, los 1.000 millones –el doble de la cantidad aproximada de hispanohablantes del planeta– representan imaginariamente todos los textos de la lengua y sus lecturas posibles.
El libro se presenta el viernes 26 a las 19.30 hs. en Centro cultural Roberto Fontanarrosa (San Martín y San Juan), con la lectura de 12 de los poetas antologados.
Presentación a cargo de dos de los compiladores de la antología: Daiana Henderson y Bernardo Orge.

Los autores que integran esta antología

  • Mara Pastor (San Juan, Puerto Rico, 1980)
  • Jeymer Gamboa (Santa Cruz de León Cortés, Costa Rica, 1980)
  • Charly Gradin (Bs. As., Argentina, 1980)
  • Laura Jaramillo (Nueva York, EE.UU., 1980)
  • Glaem Parls (Santo Domingo, República Dominicana, 1980)
  • Martín Batallés (Montevideo, Uruguay, 1981)
  • Lizabel Mónica (La Habana, Cuba, 1981)
  • Francisco Bitar (Sta. Fe, Argentina, 1981)
  • Maggie Torres (Asunción, Paraguay, 1981)
  • Francisco Tomsich (Nueva Helvecia, Uruguay, 1981)
  • Tilsa Otta (Lima, Perú, 1982)
  • Víctor López Zumelzu (Curacaví, Chile, 1982)
  • Emma Villazón Richter (Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, 1983)
  • Christian Kent (Asunción, Paraguay, 1983)
  • Pablo Fidalgo Lareo (Vigo, España, 1984)
  • Luis Eduardo García (Guadalajara, México, 1984)
  • Julio Alberto Balcázar (Caracas, Venezuela, 1984)
  • Pamela Romano (La Paz, Bolivia, 1984)
  • Javier Ramírez Nadie (San Salvador, El Salvador, 1985)
  • Mayra Serra (Montevideo, Uruguay, 1985)
  • Ana Carrete (San Diego, EE.UU., 1985)
  • Yaxkin Melchy (México DF, 1985)
  • Greta Montero Barra (Coronel, Chile, 1986)
  • Gerardo Arana (Querétaro, México, 1987-2012)
  • José Laura (Cochabamba, Bolivia, 1987)
  • Berta García Faet (Valencia, España, 1988)
  • Johanna Raabe (San Salvador, El Salvador, 1989)
  • Vicente Monroy (Toledo, España, 1989)
  • Urpi Orihuela Cruz (Arequipa, Perú, 1990)
  • Caterina Scicchitano (Mar del Plata, Argentina, 1992)
  • Kevin Castro (Lima, Perú, 1993)
  • Óscar García Sierra (León, España, 1994)
  • Alexandra Espinosa (Bogotá, Colombia, 1995)

Poesía en acción



Nota en el suplemento Señales, de La Capital. 
Domingo 21 de septiembre de 2014, Rosario.



Poesía en lengua española del siglo XXI, poesía de Rosario, Juan José Saer. Esas son las etiquetas con las que se presenta este año el Festival internacional de Poesía de Rosario, que iniciará una nueva edición el próximo jueves, con la participación de destacados poetas nacionales e internacionales y una programación que además de las lecturas habituales en los eventos de su tipo agrega talleres, espectáculos, trasnoches y diversas actividades en distintos puntos de la ciudad.
La vigésimo segunda edición del encuentro se realizará en el Centro Cultural Roberto Fontanarrosa, el Teatro de Plataforma Lavardén, el Centro Cultural Parque de España y en otros espacios de la ciudad hasta el próximo domingo, con poetas argentinos e invitados especiales de España, Alemania, India, México, Uruguay, República Dominicana, Paraguay, Bolivia, Colombia y Perú. Se realizarán los talleres Programas de escritura, a cargo de Mario Ortiz; Edición independiente de libros, por Gustavo López; Producción de la Revista Virtual del Festival, coordinado por Pablo Makovsky; y Reescribir la historia desde el poema, por Pablo Fidalgo Lareo. Además tendrá lugar la Feria de editoriales de poesía, un ciclo de conciertos relacionados con el género y lecturas de trasnoche en el bar Bienvenida Casandra. “El Festival ya es política de Estado”, dice Martín Prieto, coordinador general, al adelantar el plan de la nueva edición en la siguiente entrevista.
-¿Cómo se plantea esta edición del festival, qué balance hacen de los anteriores y cómo sitúan el actual respecto del futuro?
Para esta nueva edición del Festival hemos trabajado sobre tres ejes constitutivos: el homenaje a Juan José Saer, la publicación y presentación de Mil millones y la utilización del Festival como una suerte de caja de resonancia y cañón de proyección de las nuevas publicaciones de los autores de nuestra ciudad. Esto último me parece muy importante: acompañar, desde la dimensión de un Festival internacional, la publicación de El año de Stevenson, de Elvio Gandolfo, de La casa en llamas, de Rubén Echagüe, de Ancora, de María Lanese, de Estrago en la luz, de Malena Cirasa, de Mapa, de Marcelo Scalona, de Los Noctiluca, de Ana Victoria Lovell.  Después está la dinámica propia del Festival, que tampoco puede programarse con coordenadas de acero. Hacía varios años que veníamos invitándola a María Teresa Andruetto, finalmente pudo venir esta vez, lo mismo sucedió con Pedro Mairal, surgió la posibilidad de que viniese Carlos López Degregori, un poeta muy importante del Perú y, además, autor de un par de antologías de poesía peruana de primera línea. Es decir, hay una estructura y por debajo o a los costados, mucha movilidad.

-¿Por qué homenajear a Juan José Saer? ¿Cuál es el lugar de Saer respecto de la poesía argentina contemporánea? ¿No está ausente como referencia, por ejemplo si uno lee la antología 30.30 que se presentó el año pasado?
Este año se publicaron los poemas borradores e inéditos de Saer. En la tapa del libro aparece la copia de un poema manuscrito en un papel membretado del Palace Hotel, que quedaba en Córdoba y Corrientes. En el libro hay además unos nocturnos a Rosario, un poema dedicado a Helvecia, hay mucha topografía santafesina. Nos pareció una linda oportunidad de que el Festival volviera sobre Saer -quien participó, como invitado, en la edición del año 2000, instancia de la que se conserva un discreto registro audiovisual, pero un excelente audio. Creo que el mejor audio que se conserva de Saer leyendo poemas. Algo de eso se escuchará también en el homenaje. Y con esa inquietud, sondeamos el panorama. Le preguntamos a María Teresa Gramuglio, que es la gran especialista de Saer, y que es de Rosario, y que publicó su primer libro hace menos de un año en la Editorial municipal, si acaso no querría venir a dar una conferencia sobre los poemas de Saer, le preguntamos a Jorge Fandermole si no querría venir a cantar sus canciones saerianas, le preguntamos al Tigre Isaías, a Fabián Casas y a Francisco Bitar si no querrían venir a discutir la vigencia de la obra poética de Saer, le preguntamos a su amiga de siempre, de las épocas del Instituto de cine de Santa Fe, Marilyn Contardi, si no querría venir a leer poemas de Saer. Todos quisieron. Quisieron en menos de un minuto. ¿Cómo no hacerlo? Y no, no estoy de acuerdo con que sea una referencia ausente. Una referencia importante, una influencia es también algo de lo que se huye, ¿no?

-La edición de 30.30 y ahora de Mil millones, ¿apunta a anticipar la novedad en poesía?
Creo que una de las cosas más importantes que se hicieron en las últimas ediciones del Festival fue la incorporación de “el libro del Festival”. Fue una idea extraordinaria que permitió que el Festival siguiera después del Festival, que lo trascendiera, que llegara hasta donde llega cada uno de los ejemplares de los libros publicados. El 30.30 se inscribe dentro de esa serie. Y es un libro al que le fue muy bien. Las críticas publicadas fueron muy auspiciosas, fue muy importante el deseo que se movió a su alrededor -ganas de estar, bronca por no estar: esas cosas también hablan de un libro de esas características. Y, además, la selección del libro para formar parte de la colección de poesía Juan Gelman, del Ministerio de Educación de la Nación, que posibilitó una segunda tirada, de doce mil ejemplares, que se distribuirá en las escuelas secundarias de todo el país. Con ese respaldo decidimos doblar la apuesta y hacer una antología internacional de poesía del siglo XXI escrita en español. Y con el acompañamiento de la red de Centros culturales de España, de la Embajada de México, del Filba, de Acción Cultural Española, logramos que nos acompañen, en la presentación del libro, muchos de los autores seleccionados: de España, de Santo Domingo, de México, de Paraguay, de Uruguay, de Bolivia, de Perú, de Colombia, de Costa Rica.

-Los poetas jóvenes tienen una presencia predominante en el festival. ¿Qué líneas aparecen, qué novedad o punto de ruptura podría situarse por ejemplo en el caso de la poesía argentina respecto de la poesía de los 90 o de la primera década de este siglo?
Yo diría que es una presencia importante: no predominante. Y que esa era una deuda que tenía el Festival, la historia del Festival, con los jóvenes poetas. En una época se los programaba a la mañana. Luego se los programó en los trasnoches, en los bares. Finalmente fueron ubicados en la programación central. ¿No es lindo que sea el Festival, también, un espacio de revelación de nuevos poetas? ¿Si el Festival hubiese existido en 1923 no hubiese sido lindo que viniera el joven Borges a leer sus fresquísimos poemas de Fervor de Buenos Aires, independientemente del resquemor que su presencia hubiese causado entre la vieja guardia modernista y postmodernista?

-Seguramente. Ahora, en los últimos años, hubo algunas críticas respecto de una pérdida de público y por el cambio de la sede histórica del festival, el ex Bernardino, que ahora parece recuperar un lugar más importante. ¿Qué proyección puede hacerse para el futuro?



El Festival se constituyó y se fortaleció y creció, desde su primera edición, a partir de las críticas. En aquel entonces, recuerdo, en Diario de Poesía publicamos una carta de Aldo Oliva en la que renunciaba a leer en el Festival porque lo habían programado en una mesa junto con otros ocho poetas -y las legendarias lecturas de Aldo eran de largo alcance. Ahora hay una nostalgia manifiesta aquí y allá por las, en efecto, lecturas desbordadas de público que se hacían en el Bernardino en los años 90. Pero, ojo, esos eran los paradójicos efectos “positivos” de las lamentables políticas públicas culturales del menemismo. En ese entonces Rosario era un bastión de la resistencia. Ahora las políticas públicas culturales de la Nación, de la provincia, han cambiado positivamente, en muchos casos, eso está claro, tomando como ejemplo -no siempre de manera explícita desde la Nación- las políticas de la ciudad. Y entonces hay un Festival de poesía en la Feria del Libro en Buenos Aires, hay otro Festival en Córdoba, existe el Filba, existen lecturas en la Feria de Tecnópolis, hay lecturas acá y allá. Y esa condición de “templo de la resistencia” que tuvo en su momento el Festival, desapareció. Por suerte desapareció. Pero a cambio, y para seguir marcando tendencias, el Festival se ha expandido por toda la ciudad, desde El Obrador hasta la Biblioteca Estrada, desde el Rosa Ziperovich a la Facultad de Humanidades, desde el Felipe Moré hasta la Feria del Bulevar, desde la Biblioteca Argentina hasta el Superior de Comercio. Y sacamos los libros -de los jóvenes, sí, pero también de Juanele, de Urondo, de Tuñón, de Beatriz Vallejos. Y hacemos la feria de editoriales de poesía independiente con apoyo material para que los editores de todo el país puedan venir a Rosario a vender sus libros. Y hacemos los talleres y las clínicas, que tienen, siempre, cupos completos y que le dan al Festival una dimensión formativa también ¿El año que viene? Lo empezaremos a pensar el lunes 29 de septiembre. Lo único que sabemos es que habrá nueva edición del Festival. Que no es un asunto que se discuta en el Ministerio de Innovación y Cultura de la provincia, ni en la Secretaría de Cultura de la Municipalidad, ni el Parque de España. El Festival ya es política de Estado.

Saer en el Festival internacional de Poesía de Rosario


-Usted dijo que Rosario fue la primer ciudad que conoció cuando salió de su Serodino natal, ¿qué recuerda de aquella primera visita?
-Yo era muy chico, así que el recuerdo más vívido que tengo de aquella ocasión es un kiosko. Me pareció la cosa más fantástica del mundo; un local íntegramente lleno de caramelos.
-¿Qué influencia tiene su Serodino natal, el entorno rural, la provincia, en su trabajo?
-Mucha. Serodino es el paisaje interior y exterior, es decir mi paisaje físico y mental, el de la infancia, y esto está muy presente en toda mi obra. Eso se manifiesta sobre todo en los años 60, 70 y 80, que yo tenía una tendencia a ponerles nombres a todos mis personajes, y esos nombres salían de la región en la que yo había nacido y crecido.
-¿Y de allí, de su zona, a quién reconoce como referentes literarios?
-Naturalmente a Juan L. Ortiz, que es también uno de los grandes poetas de nuestra lengua. También están Hugo Gola, Hugo Padeletti, Aldo Oliva, que lamentablemente acaba de morir; toda gente un poco mayor que yo, pero que me incluía dentro de su círculo.
-¿Siente que escribe desde la distancia, desde el lugar del desarraigo?
-No. Yo escribo desde el universo imaginario que he ido constituyendo a través de mis libros. Ese es mi referente y mi punto de vista. Por eso siempre digo que desde mi punto de vista, en tanto que escritor, París es un suburbio de Serodino.
-Como hombre de múltiples oficios en el terreno de las letras (narrador, filósofo, poeta, dramaturgo, guionista), ¿cuál es el lugar que ocupa la poesía en su producción?
-La poesía es el punto de partida en mi trabajo de escritura. Yo comencé escribiendo poesía, seguí con teatro y recién después ingresé al terreno de la narrativa. Escribí muchísima poesía, porque no me sentía atraído ni capacitado para hacer narrativa. Finalmente uno nunca hace lo que quiere. De hecho, hace mucho que no escribo poesía; mis últimos poemas son del año 87. Sin embargo no pierdo la esperanza de volver a ella en algún momento de la vida.


Fragmento de la entrevista "El suburbio de Serodino", de Fernanda González Cortiñas, publicada en el diario Rosario 12 el 3 de noviembre de 2000, cuando Saer participó como invitado en la VIII edición del Festival. Entrevista completa: http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/rosario/9-5502-2006-09-28.html

22º Festival internacional de Poesía de Rosario 2014

25, 26, 27 y 28 de septiembre

El Festival Internacional de Poesía de Rosario, organizado por el Centro cultural Parque de España, la Secretaría de Cultura y Educación de la Municipalidad de Rosario y el Ministerio de Innovación y Cultura de la Provincia de Santa Fe,es el encuentro más importante de su especialidad que se realiza en la Argentina.

Su vigésimo segunda edición se realizará en el Centro cultural Roberto Fontanarrosa, en Plataforma Lavardén, en el Centro cultural Parque de España y en otros espacios de la ciudad entre los días 25 y 28 de septiembre de 2014.
Participarán poetas argentinos  e invitados especiales de España, Alemania, India, México, Uruguay, República Dominicana, Paraguay, Bolivia, Costa Rica, Colombia y Perú.
Esta nueva edición del Festival incluirá un homenaje al poeta argentino Juan José Saer, a propósito de la edición de sus Poemas, borradores inéditos y la publicación de la antología 1.000.millones. Poesía en lengua española del siglo XXI.
Se realizarán los talleres Programas de escritura, a cargo de Mario Ortiz, Edición independiente de libros, por Gustavo López, Producción de la revista virtual del Festival, coordinado por Pablo Makovsky, y Reescribir la historia desde el poema, por Pablo Fidalgo Lareo.
Como en años anteriores, se desarrollará la Feria de editoriales de poesía y un ciclo de conciertos relacionados con el género.


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Homenaje a Juan José Saer

Jueves 25. Teatro de Plataforma Lavardén

La publicación de Poemas, borradores inéditos de Juan José Saer es un acontecimiento de la mayor relevancia para la literatura argentina. Tiene además un interés particular para el ámbito cultural santafesino, debido a las referencias, en muchos de sus poemas, a Colastiné, Helvecia, entre otras localidades de la provincia. La edición incluye dos nocturnos dedicados a la ciudad de Rosario, uno de ellos, fechado en enero de 1968, manuscrito en un papel membretado del viejo Palace Hotel, de Corrientes 791. En unos papeles autobiográficos, también inéditos, el autor de Serodino anota, recordando los viajes que hacía a principios de los años 60 como vendedor de comercio del negocio de su padre por el norte de Santa Fe: "de esos viajes me han quedado imágenes maravillosas. Aún hoy me quedaría horas enteras mirando el mapa de la provincia, y a cada nombre de esos pueblos perdidos me vienen recuerdos intensos y luminosos. La costa, sobre todo, parece haberme marcado para siempre".
El Festival internacional de Poesía de Rosario rinde homenaje a uno de los máximos escritores santafesinos, así mismo invitado a participar del Festival en la edición del año 2000, con una serie de actividades que reflexionan sobre su universo poético y sus proyecciones en la literatura argentina contemporánea.

Conferencia inaugural: "La fábrica de Juan José Saer. Los inéditos, los poemas, la obra", por María Teresa Gramuglio
Mesa redonda: “La angustia de las influencias. Escribir con Saer/ Escribir contra Saer”. Con Francisco Bitar, Fabián Casas y Jorge Isaías.
Lectura de poemas de Juan José Saer, por Marilyn Contardi.
Jorge Fandermole, Concierto fluvial.

Talleres 2014


Taller de producción de la revista virtual del Festival
Coordinado por Pablo Makovsky
El taller está pensado como un espacio de formación en periodismo literario focalizado en difusión de poesía. Funcionará antes y durante los días del Festival.
Con coordinación de Pablo Makovsky, los talleristas harán una crónica diaria, con entrevistas, relatos y testimonios, para cerrar con la producción y edición de una revista en formato multimedia que será presentada al público en la jornada de cierre. La revista resumirá las actividades y, a la vez, será un documento particular del 22º Festival Internacional de Poesía de Rosario.
http://fiprr.blogspot.com.ar/
Lugar: Centro Cultural Parque de España y Centro Cultural Roberto Fontanarrosa.
Días y horarios: la primera reunión entre los coordinadores y los postulantes seleccionados se realizará el miércoles 3 de septiembre a las 15 hs en la Videoteca del Centro Cultural parque de España. En esa reunión se acordarán las fechas de las reuniones sucesivas.
Inscripción: inscripcion@ccpe.org.ar, adjuntando cv y una breve propuesta de trabajo que señale el interés en participar de la experiencia (no más de 1.500 caracteres). Se recibirán postulaciones hasta el 31 de agosto inclusive.
Dirigido a: jóvenes entre 18 a 30 años residentes en la ciudad de Rosario. Periodistas, escritores, fotógrafos, videastas, diseñadores web, animadores, dibujantes, ilustradores.
Cupo: 15 participantes.
Actividad gratuita



 

Taller Programas de Escritura
Dictado por Mario Ortiz
El propósito de los encuentros será abrir un espacio de reflexión que permita pensar la producción literaria no ya en términos de textos aislados sino según un programa de escritura.
En la primera de los dos jornadas se desarrollarán algunos conceptos teóricos mínimos que el poeta bahiense ilustrará con ejemplos extraídos de su propia experiencia. A partir de aquí, se buscará estimular la reflexión poética y crítica sobre la escritura de los talleristas.
El segundo encuentro será un diálogo abierto en el que los participantes podrán exponer sus reflexiones y sus propios proyectos de escritura en forma libre y voluntaria.
Inscripción: escribir a programasdeescritura@gmail.com indicando nombre, apellido y dni, y adjuntando 3 poemas. Hasta el 15 de septiembre inclusive. Durante los encuentros, el cupo de oyentes será libre.
Lugar: Biblioteca Argentina Dr. Juan Álvarez (Roca 731)
Días y horarios: viernes 26 y sábado 27 de septiembre de 10 a 13 hs.
Actividad gratuita



 

Reescribir la historia desde el poema
Dictado por Pablo Fidalgo
La obra poética del poeta y dramaturgo español Pablo Fidalgo parte de la búsqueda sobre la historia de su familia y su significado, como si los éxitos y fracasos de sus antepasados dieran la clave para entender su historia personal. Esta inquietud lo llevó a rastrear el destino de familiares exiliados en Buenos Aires durante la guerra civil española, dando como resultado la unión de su historia personal –vinculada a Argentina– con su propia creación.
El taller se plantea como un ejercicio práctico de investigación en la propia vida personal, entendiendo el poema como un acto de vida, como un gesto de resistencia que se dirige siempre a saber más de uno mismo. Para ello se partirá de poemas del siglo veinte: Milosz, Louise Gluck, Mark Strand, Henri Cole, Jaime Gil de Biedma, Hector Viel Temperley, Gelman, Ginsberg, Pasolini, Genet, Artaud, Seferis, Ungaretti, Ingeborg Bachmann, Yves Bonnefoy, Thomas Bernhard. Lo profano y lo sagrado. El día a día de los poemas, de la lectura, de la escritura, de los tiempos de silencio y de la corrección.
Inscripción: escribir a festdepoesia.rosario@gmail.com indicando nombre, apellido y dni, con el asunto "Taller Reescribir la historia". Hasta el 15 de septiembre inclusive. Durante los encuentros, el cupo de oyentes será libre.
Lugar: Centro cultural Roberto Fontanarrosa (San Martín y San Juan)
Días y horarios: viernes 26 y sábado 27 de septiembre de 14 a 17 hs.
Actividad gratuita



 

Taller de Edición Independiente
Dictado por Gustavo López
El taller apunta a compartir experiencias y modos de trabajo que distintos proyectos editoriales han desarrollado a través de su práctica. Ejes: Factura de libros. Papel, impresiones, encuadernación, diseño, libros-objeto. Gestión y organización. Catálogo, distribución y difusión, evaluación de la misión del proyecto, financiamiento. Futuro y presente de la edición. Nuevos formatos, tensión y vínculo entre ediciones en papel y digitales.
Lugar: Biblioteca Central Facultad de Humanidades y Artes, UNR (Entre Ríos 758)
Días y horarios: viernes 26 y sábado 27, de 10 a 13 hs.
Inscripción: escribir a inscripcion@ccpe.org.ar indicando nombre y apellido, dni, actividades editoriales desarrolladas o proyecto a desarrollar. Cierre de inscripción: 15 de septiembre.
Dirigido a: editores, diseñadores, programadores, artistas, escritores, creadores independientes.
Cupo: 20 participantes.
Actividad gratuita